Hay que admitir que Dios sufre. Dios no es el Todopoderoso ni el Bienaventurado que creemos que es.
Florin pronunció estas palabras durante la Semana Santa de 1995, cuando la guerra en Bosnia-Herzegovina llevaba ya tres años y en Argelia se vivía una guerra civil (también llamada “la década oscura” que no terminaría hasta el año 2000). En Ruanda, el...